En esta vida todos somos propensos a equivocarnos y a cometer errores. Por ello como no estamos libres de cometerlos queremos pedir disculpas por los que podamos haber cometido. Lo importante de los errores debe ser aprender de ellos, pedir disculpas y también valorar las razones que nos hacen cometerlos para evitar volver a cometerlos.
Todos os habréis dado cuenta de los errores en la tarjeta de felicitación y seguro que os habéis sonreido por ello, olvidando lo más importante que era un mensaje para felicitar las fiestas de la Navidad y el nuevo año.
Es un ejemplo de la vida que vivimos, más pendientes de errores y detalles que de las cuestiones que verdaderamente importan. Por eso si entre todos intentamos cambiar conseguiremos un mundo mejor donde sean más importantes las personas que las cuestiones superfluas y sin importancia.
Feliz Navidad y próspero año nuevo.