lunes, 16 de abril de 2012

El pasado viernes tuvo lugar la Asamblea General Ordinaria correspondiente al presente año

A las 21:30 horas daba comienzo en uno de los Salones Parroquiales la Asamblea General Ordinaria de la Hermandad relativa al presente año 2012.

Un vez más los salones se quedaban pequeños para dar cobijo al gran número de hermanos y hermanas que se congregaban para asistir y participar en la junta.

Iniciaba la sesión nuestro Hermano Mayor para dar la bienvenida a todos los congregados, dando paso a continuación a Doña Ana María Morales, vocal de cultos y espiritualidad, que leía una reflexiva y sustanciosa monición donde se nos invitaba a la unión y la fraternidad entre todos nosotros, a la vez que le daba gracias a Nuestro Señor por permitirnos pertenecer a esta Hermandad y poder realizar nuestra Estación de Penitencia el pasado Viernes Santo. La monición daba paso a la oración en honor a Nuestra Santa Titular dirigida por Don Aníbal Miller Cantero, párroco de nuestra Sede Canónica, quién nos invitaba a la comunión y al trabajo colectivo dentro de la Hermandad.
A continuación el Secretario procedió a la lectura del acta de la Asamblea anterior que fue aprobada por unanimidad.

Don Enrique Muñoz, tesorero de la Hermandad, ofreció un informe detallado y pormenorizado del estado de cuentas correspondiente al ejercicio 2011 que, una vez aprobadas por la Asamblea y con el Vº. Bº. y la firma de D. Juan Caballero, consiliario de la Hermandad, serán remitidas al Obispado para su aprobación. Igualmente se comunicó a todos los asistentes el estado actual de las cuentas de la Hermandad.

De nuevo tomaba la palabra Don Joaquín Sánchez, secretario de la Hermandad, para proceder a la lectura de un resumen de las numerosas actividades realizadas en el curso cofrade 2011/2011.

Se procedía posteriormente al turno de ruegos y preguntas con una nutrida participación donde se trataron diversos temas del interés de los asistentes.

Seguidamente Don Aníbal Miller Cantero compartía con los asistentes su satisfacción por el desarrollo de la asamblea y el duro trabajo que realiza la Junta de Gobierno. A continuación y para terminar, como mandan nuestros Estatutos, se rezaba una oración por las almas de nuestros hermanos difuntos y se invocaba a la Santísima Virgen, tras la cual impartía la bendición a todos los hermanos y hermanas cofrades que se dieron cita en el cabildo.