Tras la llegada de Nuestra Patrona a su Santuario desde Villanueva de Córdoba, Nuestra Hermandad acudió fiel a su cita con tan Excelsa Señora para celebrar la Santa Misa en Acción de Gracias ante sus plantas y para compartir una jornada de convivencia entre los hermanos y hermanas cofrades.
A las 14:30 horas daba comienzo la Eucaristía presidida por el párroco de San Sebastián, Don Aníbal Miller Cantero y preparada litúrgicamente por la vocalía de cultos de Nuestra Hermandad. La providencia nos tenía preparada para la celebración eucarística unas lecturas profundas y llenas de contenido. Durante la Santa Misa, Don Aníbal nos exhortaba a ponernos en manos de Dios y dejarnos iluminar por su luz, confiar en la Santísima Virgen como mayor ejemplo de fidelidad y confianza en Nuestro Señor. Animaba a todos los congregados a continuar trabajando y viviendo en Hermandad, todo para mayor gloria de Nuestra Santísima Titular. Concluía la sencilla y emotiva Eucaristía cantando la Salva a la Santísima Virgen María como es tradicional en Nuestra Hermandad al finalizar todos los cultos.
Tras la Eucaristía la Hermandad depositó bajo los pies del altar de la Virgen de Luna un ramo de flores en ofrenda y agradecimiento a la Santísima Virgen.
Una vez concluida la Santa Misa en el Santuario de Nuestra Señora de Luna, la convivencia prosiguió en el Local de Ensayo de la Agrupación Musical debido al mal estado en el que se encontraba el entorno a la Ermita de la Virgen de Luna tras las intensas lluvias que se desarrollaron los días previos.
Una animada jornada la que pudieron confraternizar y compartir todos los hermanos y hermanas cofrades. Apetitosos platos de comida sobra una larga mesa para degustarlos en común y comprobar las esmeradas cualidades culinarias de todos. Animadas tertulias se desarrollaron entre risas y anécdotas se dieron lugar en la jornada. Tras los postres, dulces y café, la tarde se animó con cantos y bailes, desde sevillanas y rumbas, hasta jotas y villancicos, que propiciaron muchos de lo mejores momentos de la tarde.
Una vez entrada la noche pudimos disfrutar de dos extraordinarios arroces que nos prepararon con cariño durante toda la tarde Enrique Moreno y José Luis Llergo.
Se trata de una jornada esperada por todos los hermanos y hermanas soledanas que acuden con júbilo al encuentro con la Virgen de Luna y a compartir la mesa con todos los miembros de Nuestra Hermandad entre risas, tertulias y momentos únicos de vivir en Hermandad.
Esperamos que cada año sean más los hermanos soledanos que decidan disfrutar y compartir esta hermosa cita con la Hermandad.
