El pasado sábado, aprovechando la visita a la Diócesis de Córdoba del Reverendísimo Cardenal Stanislaw Rylko, Presidente del Pontificio Consejo para los Laicos, los jóvenes asistentes de la diócesis a la Jornada Mundial de la Juventud en Madrid estaban invitados a un encuentro con el mencionado Cardenal en la Iglesia cordobesa de la Compañía. Una cita a la que asistieron varios jóvenes de nuestra Hermandad.
Alrededor de las 19:00 horas llegaban al templo, el relicario con el corazón incorrupto de San Juan de Ávila, copatrono de la JMJ, ante el que los numeros asistentes oraron hasta la llegada del Señor Cardenal junto al Señor Obispo de Córdoba Don Demetrio Fernández.
El Señor Cardenal fue presentado a los asistentes por parte de Don Pablo Garzón, Delegado Diocesano de Juventud, el cual destacó la importante vinculación que ha tenido en los encuentros mundiales de la Juventud con el Santo Padre. Ha continuación el Señor Cardenal se dirigía a los jóvenes denominándolos con satisfación los jóvenes de la generación de la JMJ. Le pidió a todos los jóvenes que amasen a la Iglesia, una Iglesia que les ha ayudado a conocer a Cristo y a descubrir la belleza de su amor. También afirmó que en estos momentos ya no basta con hablar de Cristo sino que hay que mostrarlo con testimonios palpables y en la Jornada Mundial han sido muchos los vividos.
A continuación, varios jóvenes en representación de todos los jóvenes cordobeses realizaron distintas preguntas al Señor Cardenal, tratando los temas de la Nueva Evangelización, las vocaciones sacerdotales, su relación con el venerado y querido beato Juan Pablo II...
El encuentro continuó con la celebración de la Santa Misa en Acción de Gracias por los frutos de la JMJ, presidiendo la Santa Catedra el Cardenal Rylko junto a Don Demetrio Fernández, Obispo de nuestra diócesis. La Santa misa fue concelebrada por numerosos sacerdotes entre los que se encontraba Don Pedro Fernández, párroco de Santa Catalina.
Finalizó el encuentro con un adoremus al Santísimo por parte de todos los asistentes en un ambiente de profundo recogimiento y oración.