Pasados unos minutos de las 18:00 de la tarde del domingo 11 de diciembre en los salones parroquiales, un apasionado Don Juan dirigía a todos los congregados unas hermosas palabras que nos sirvieran como preparación a la llegada de Nuestro Señor Jesucristo por medio del misterio de la Encarnación.
Una mención especial dedicó a la esperanza, no podemos vivir sin esperanza y aun menos en los tiempos tan difíciles en los que nos encontramos, afirmaba nuestro Capellán y Director Espiritual. A lo largo del retiro tomaba las palabras de San Juan Bautista: "En medio de vosotros hay uno al que no conocéis" (Juan 1,26), de este modo nos animaba a esperar al Señor, a estar preparados para su llegada y recibirlo en nuestro corazón como una Madre espera y acoge a su hijo.
Durante algo más de una hora se prolongó un emotivo y reflexivo retiro, salpicado de anécdotas y humor al que nos tiene acostumbrados nuestro querido Capellán.
Tras el retiro, los asistentes se desplazaron a la parroquia donde compartieron la Eucaristía con el resto de feligreses que se dieron cita en el templo para escuchar la Misa de la tarde, una Misa que estuvo preparada litúrgicamente por la vocalía de cultos de nuestra Hermandad y durante la cual se encendió la tercera vela de la corona de adviento, la vela de la alegría.